Adiós, “Paolín”/ Oswaldo Rivasplata

Oswaldo Rivasplata

Periodista deportivo

Se juegan los segundos de descuento en el partido por el descenso, en el que el descontrol y la angustia se mezclan al tiempo que la tribuna arde y todos, o casi todos, le cargan las responsabilidades del gol al nueve, líder y capitán. Lucha, fragor, denuedo, coraje. Y el tiempo que se acaba.

Así podría sentirse a esta hora Paolo Guerrero dentro del melodrama que protagoniza en tanto busca liberarse de un club que aceptó todos sus requerimientos para contratarlo y lo trató bien mientras él, otra vez, se asume como víctima o desconoce la autocrítica.

Pues hoy argumenta ser extorsionado como ayer fue: “me voy si no renuevan al DT” en LDU y antes los roces con el DT Gago en Racing o, mucho antes, la famosa  “contaminación cruzada” que igual le valió ser sancionado y tampoco tuve culpa.  Vale decir, en la medida que ya son varios los casos, la duda se acrecienta – o su imagen se deteriora – y ora corre el serio riesgo de terminar su rica trayectoria como ningún peruano quisiera: envuelto en un nuevo conflicto, criticado o sin poder jugar.

A esta altura, cuando el libro de pases en Perú ya está por cerrarse (el 26 del corriente) y el juego con los medios de comunicación le está saliendo al revés, ejemplar sería asuma su responsabilidad. Vale decir, deje la confrontación, se siente a negociar con su empleador y sea cedido a préstamo al equipo donde deseé ir.

Que deje de ser “Paolín” y vuelva, para quedarse, “el Depredador”.

Hasta la próxima.

About Author

Causa Justa

Destacadas

Artículos Relacionados