¿Y la valentía que tanto pregona? Todo hace indicar que el alcalde de Trujillo, Arturo Fernández Bazán, no puede sostener sus palabras, de allí que se le corra al juicio que le entabló el reconocido arqueólogo Ricardo Morales Gamarra, por haberlo difamado al insultarlo y lanzar graves imputaciones sin sustento alguno.
Esto se deduce de la serie de argucias que viene presentando para que no se inicie el juicio. Hoy, en horas de la mañana, una vez más el abogado de Arturo Fernández no se presentó a la audiencia de inicio de juicio y argumentó que esa ausencia se debía a razones de salud para lo cual presentó un certificado médico a los jueces. En tanto, el abogado de oficio, pagado por el Estado, pidió otra fecha de la audiencia para tener tiempo de leer el expediente y asumir a la defensa.
Ya, antes de estos, en semanas pasadas, el abogado de Arturo Fernández no se había presentado a la audiencia. El caso se está ventilando en el Primer Juzgado Unipersonal de la Corte Superior de Justicia de La Libertad. Este conflicto se originó en 2019 cuando Arturo Fernández era alcalde del distrito de Moche y buscaba intervenir en un camino cercano a las huacas de la jurisdicción. Morales Gamarra, en su papel de director del Proyecto Huacas de Moche, se opuso a estas intervenciones, lo que desencadenó una serie de acusaciones y difamaciones por parte del alcalde.
El arqueólogo sostiene que Arturo Fernández abusó de su posición como alcalde al proferir acusaciones sistemáticas y maliciosas que afectaron su reputación y honor. Entre las acusaciones, se incluyen la insinuación de actos de corrupción y el tráfico de piezas arqueológicas, lo que impactó negativamente en su intachable reputación como director del proyecto. Morales Gamarra, exdirector del Proyecto Huacas de Moche, lo denunció a Arturo Fernández por graves acusaciones en su contra y le pide hasta 100 mil soles de reparación civil y cárcel contra Arturo Fernández.
“El querellado (Arturo Fernández), escudándose, indebidamente, en su condición de alcalde de la Municipalidad Distrital de Moche, viene atribuyendo al recurrente, de manera sistemática y maliciosa, hechos, cualidades y conductas evidentemente deshonrosas, a través de su medio de comunicación social de la página de la Municipalidad”, señaló Morales en su demanda.
Entre los hechos que afectan su honor y buena reputación, según el querellante Ricardo Morales, aparecen acusaciones vinculadas a “actos de corrupción” y el “tráfico de piezas arqueológicas”. “Estas imputaciones evidentemente afectan la intachable reputación y honor que ostento como director del señalado proyecto”, añadió en la demanda.