Congelamiento de fondos de USAID deja a familias en Trujillo sin ayuda humanitaria

La crisis humanitaria se agudiza en Trujillo tras el reciente congelamiento de fondos de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), decisión tomada durante el gobierno del presidente Donald Trump. Esta medida ha dejado a cientos de familias, tanto peruanas como migrantes, sin acceso a asistencia básica en sectores clave como atención médica, alimentación y educación.

El regidor Leonel Cruz, del distrito de La Esperanza, expresó su profunda preocupación por el impacto que esta decisión ha tenido en la comunidad local. Cruz resaltó la importancia de USAID como uno de los principales contribuyentes para diversas ONGs que trabajaban en Perú, brindando apoyo a poblaciones vulnerables. Aunque el regidor reconoció que el congelamiento de fondos responde a una estrategia para combatir el desvío de recursos, también destacó que esta medida afecta directamente a las familias más necesitadas, especialmente a los migrantes que llegan a Trujillo en busca de mejores oportunidades.

A pesar del difícil panorama, algunas organizaciones han logrado ofrecer asistencia gracias a la colaboración interinstitucional. Este mes, 100 migrantes y 20 ciudadanos peruanos recibieron kits de aseo personal y atención médica gratuita, en una jornada organizada por la Organización Panamericana de la Salud, la ONG HIAS, el Hospital Jerusalén, la Cruz Roja y el Templo de Dios. La actividad se llevó a cabo en el local del Templo de Dios, como parte de una iniciativa mensual que busca aliviar las carencias de las familias afectadas.

Sin embargo, esta asistencia es insuficiente frente a la creciente demanda. El regidor Cruz advirtió que la ayuda humanitaria se ha reducido drásticamente en comparación con el año anterior, lo que ha generado incertidumbre y preocupación entre las comunidades más vulnerables. «Es crucial que las autoridades locales y nacionales tomen medidas para garantizar que estas familias continúen recibiendo el apoyo que necesitan», subrayó Cruz, instando a la cooperación entre el sector público y las organizaciones internacionales para encontrar soluciones sostenibles.

El congelamiento de fondos de USAID ha afectado principalmente a las ONG que implementaban programas esenciales en áreas como nutrición infantil, salud primaria y capacitación laboral para migrantes. Este recorte no solo limita el acceso a servicios básicos, sino que también amenaza con agravar la situación de pobreza y exclusión en diversas zonas de Trujillo, especialmente en sectores como La Esperanza y El Porvenir, donde se concentra gran parte de la población migrante.

Mientras tanto, las familias afectadas siguen esperando respuestas y alternativas para superar esta difícil situación. La participación activa de organizaciones locales y el fortalecimiento de redes de apoyo se perfilan como fundamentales para enfrentar la crisis humanitaria que afecta a cientos de personas en Trujillo.

Aunque la jornada de asistencia en el Templo de Dios ha llevado un respiro a algunos, queda claro que el camino hacia una solución definitiva requiere de mayor colaboración y compromiso por parte de las autoridades locales y nacionales, así como de la comunidad internacional. Sin estos esfuerzos conjuntos, muchas familias seguirán enfrentando la incertidumbre y la falta de recursos básicos en los próximos meses.

About Author

Causa Justa

Destacadas

Artículos Relacionados