El futbolista y exseleccionado Paolo Guerrero ha decidido no jugar en Trujillo con la Universidad César Vallejo debido a amenazas dirigidas a su familia, según reveló César Acuña, gobernador regional de La Libertad.
Acuña mencionó que las amenazas comenzaron el mismo día en que Guerrero firmó su contrato con el club. La negativa de Guerrero se fundamenta en el temor por la inseguridad ciudadana en Trujillo, donde incluso la madre del jugador, Petronila Gonzáles, conocida como ‘Doña Peta’, fue amenazada por delincuentes.
Acuña comprende la decisión de Guerrero y mencionó que el jugador está evaluando entre la seguridad de su familia y su carrera futbolística. A pesar de este contratiempo, Acuña mantiene la esperanza de que Guerrero pueda reconsiderar y cumplir su contrato con la Universidad César Vallejo.
El gobernador tiene la intención de conversar con el jugador para encontrar una solución y espera que Paolo tome la mejor decisión para él y su familia.
