Un nuevo escándalo sacude al Ministerio Público en el sur del país. El fiscal Julio César Barrientos Grimaldo, titular de la Fiscalía Mixta del distrito de Vista Alegre (Nasca), fue detenido por agentes de la Dirección Contra la Corrupción (DIRCOCOR) de Ica, tras ser acusado de solicitar un soborno de 2,000 soles a un ciudadano para favorecerlo en una investigación.
La intervención se produjo en flagrancia dentro de las propias instalaciones de la Fiscalía, luego de que Ciro Sulla Taquire —ciudadano implicado en una investigación— denunciara que el magistrado le exigía el pago a cambio de “ayudarlo en las diligencias”. De inmediato, personal especializado de la Policía Anticorrupción montó un operativo encubierto, marcando los billetes con reactivos especiales y registrando sus números de serie.

Una vez entregado el dinero al fiscal Barrientos Grimaldo, los agentes ingresaron a su despacho, encontrando el efectivo en su poder. Según fuentes oficiales, los billetes tenían reactivo luminiscente y coincidían con los previamente fotocopiados.
El Ministerio Público ha iniciado una investigación preliminar por la presunta comisión del delito de cohecho pasivo propio, tipificado como delito contra la administración pública en agravio del Estado.
La detención de un fiscal en ejercicio por presuntos actos de corrupción representa un duro golpe para el sistema de justicia en la región, donde ciudadanos y organizaciones civiles vienen demandando una lucha efectiva contra la impunidad y las malas prácticas en el sector público.
La Fiscalía de la Nación aún no se ha pronunciado de manera oficial, aunque se espera que en las próximas horas se emita un comunicado sobre el procedimiento y la situación legal del magistrado involucrado.