El suboficial Romel Vásquez Olano está librando una batalla legal y personal tras denunciar la entrega de material de protección inadecuado a los policías durante la pandemia de COVID-19. La historia de Vásquez Olano es una de valentía en tiempos de crisis, pero también una de persecución y lucha por la justicia.
En abril de 2020, en plena emergencia sanitaria, Vásquez Olano hizo una denuncia pública que sacudió a la III Región Policial de La Libertad. Aseguró que, bajo la administración del general Lucas Núñez Cordova, se había provisto a los suboficiales de mascarillas y guantes defectuosos, comprometiendo gravemente su seguridad y salud. Esta acusación no solo atrajo la atención de los medios de comunicación, sino que también precipitó severas represalias contra él.
Poco después de su intervención pública, Vásquez Olano fue expulsado de la Policía Nacional del Perú (PNP), bajo la acusación de «abandono de destino». Inspectoría Regional determinó que había incurrido en una falta muy grave, después de que el suboficial permaneciera oculto por varios días, alegando que su vida y la de su familia estaban siendo amenazadas.
Vásquez Olano no se ha quedado con los brazos cruzados. Acusó a varios oficiales, entre ellos a tres: el capitán PNP Danny Junior Atencio Castillo y los comandantes Freddy Robert Valle Gonzales y Manuel Alejandro Cama Campos. La fiscal Ana Cecilia Paredes León, de la Primera Fiscalía Provincial Penal Corporativa, está a cargo de la investigación preliminar, centrada en delitos contra la administración de justicia y abuso de autoridad.


La investigación preliminar es contra el capitán PNP Danny Junior Atencio Castillo, en calidad de jefe de la Unidad de Seguridad del Estado de Trujillo; y el comandante Freddy Robert Valle Gonzales, jefe de área de Recursos de la III Región Policial de La Libertad; y el comandante Manuel Alejandro Cama Campos, en calidad de jefe de la comisaría de Ayacucho, por el presunto delito contra la administración de justicia, en la modalidad de abuso de autoridad, en agravio del suboficial Romel Vásquez Olano.
Romel Vásquez Olano sigue luchando por limpiar su nombre y por obtener justicia no solo para él sino también para sus compañeros que continúan en servicio. La resolución de este caso será decisiva no solo para la carrera y vida de Vásquez Olano, sino también para el futuro de la transparencia y la rendición de cuentas dentro de las fuerzas policiales en Perú.