El jefe de la División de Investigación Criminal de Trujillo, coronel Javier Méndez Yupanqui, se encuentra bajo escrutinio después de proporcionar información errónea sobre una intervención policial ocurrida en la avenida Larco, en la que, además, interfirió el alcalde Arturo Fernández Bazán, con quien tuvo una fuerte discusión.
Méndez había afirmado que el detenido pertenecía a una banda de marca y que se trataba de un robo agravado resultado de «un trabajo de inteligencia» por personal de Inteligencia. Sin embargo, los documentos policiales revelan una versión diferente de los eventos.
Según los informes policiales, la intervención se llevó a cabo como resultado de una alerta sobre un presunto delito de estafa en la zona. El personal de la Policía Nacional, en colaboración con el Serenazgo, en patrullaje integrado, se dirigió al lugar para verificar la información proporcionada. Encontraron y arrestaron a Álvaro Cristóbal Cáceda Ramos (49), quien supuestamente había participado en el delito de estafa en perjuicio de la jovencita R.A.R.V. (20).
Lo que inicialmente se había informado como un robo agravado resultó ser una estafa, según los detalles proporcionados en los documentos policiales. Se alega que el detenido convenció a la víctima de que tenía monedas de oro y necesitaba ayuda para cambiarlas, lo que la llevó a retirar una suma de diez mil soles en efectivo en un banco cercano. La intervención se llevó a cabo después de que la víctima informara el incidente.
La agraviada manifestó que los hechos se suscitaron en circunstancias que se encontraba saliendo de la universidad UPAO, donde es estudiante. Es allí donde el intervenido lo interceptó y le indicó que tenía unas monedas de oro y no sabía dónde cambiarlas, ya que tenía miedo que alguien lo engañe, por lo que por medio de engaños la llevó al banco Interbank de la avenida Larco, es donde fue que ella retiro la suma 10 mil soles en efectivo que estuvo a punto de darle al estafador a cambio de las pepitas.