El Poder Judicial ordenó la captura inmediata de Arturo Fernández Bazán, el suspendido alcalde de la provincia de Trujillo, quien ha sido declarado reo contumaz. Esta decisión surge a raíz de una denuncia por difamación agravada presentada por el arqueólogo Ricardo Morales Gamarra, exdirector del Proyecto Huacas de Moche.
Fernández Bazán, conocido por sus repetidos desacatos a la ley, ahora enfrenta las consecuencias de sus acciones legales. La orden de captura y su condición de reo contumaz reflejan la gravedad de las acusaciones en su contra y su incumplimiento de los mandatos judiciales.
Con esta medida, busca asegurar que Fernández Bazán responda ante los tribunales por las acusaciones que se le imputan. La decisión la tomó la jueza Ingrid Pajares Acosta, quien ordenó su inmediata captura. Esta decisión se fundamenta en la conducta maliciosa y falta grave que Fernández ha demostrado a lo largo del proceso judicial en su contra por difamación agravada contra el arqueólogo Ricardo Morales Gamarra. La magistrada señaló que Fernández ha cometido repetidos actos de abandono de audiencia y ha utilizado hasta 30 actos dilatorios en su defensa, lo que ha obstaculizado el normal desarrollo del juicio.
La estrategia del alcalde suspendido parece estar orientada a eludir la acción de la justicia hasta que el delito prescriba, lo que sucedería en unos seis meses. Si logra que el delito prescriba, Fernández podría solicitar al Jurado Nacional de Elecciones (JNE) la restitución de sus credenciales como alcalde.
