La ciudad de Trujillo se convirtió en el epicentro del debate sobre resiliencia hídrica y adaptación climática en el país gracias a la activa participación de Sedalib S.A. en la LXX Asamblea General Ordinaria de ANEPSSA Perú.
El evento, que reunió a especialistas nacionales e internacionales en agua potable y saneamiento, sirvió como un espacio clave para discutir estrategias conjuntas ante los crecientes desafíos que plantea el cambio climático en el sector.
Fue Percy Ricardo Rosario Martell, presidente del Directorio de Sedalib, quien inauguró el foro con un llamado urgente a integrar la resiliencia climática en la planificación diaria de las Empresas Prestadoras de Servicios de Saneamiento (EPS). “La resiliencia no es un lujo ni un concepto abstracto. Es una necesidad imperante. Nuestra infraestructura y nuestro suministro de agua potable están en riesgo frente a los embates del clima, y solo una política pública robusta, articulada y eficaz podrá ayudarnos a garantizar la continuidad de estos servicios esenciales”, enfatizó Rosario Martell ante una audiencia compuesta por gerentes, funcionarios y expertos técnicos.
Desde el inicio, la jornada mostró la gravedad de la situación. Ingmar Obermann, de GIZ, remarcó que la confiabilidad del agua es un factor crítico para construir ciudades resilientes, mientras que Maribel Canchari Medina, del Ministerio de Vivienda, expuso los lineamientos que en materia de resiliencia climática viene impulsando el Estado peruano. Ambas presentaciones dejaron en claro que, si no se toman medidas drásticas de prevención y adaptación, las ciudades enfrentarán crisis de abastecimiento más severas y recurrentes.
La participación de Cindy Mantilla Salcedo desde la Dirección de Saneamiento del Ministerio reforzó esa visión. Su exposición virtual abordó los desafíos que enfrenta el país en materia de protección de infraestructura crítica, en un contexto donde los desastres naturales son cada vez más frecuentes e intensos. El enfoque de Mantilla complementó la ponencia de Boris Henry Nieves León, quien explicó los esfuerzos del OTASS para fortalecer las capacidades de las EPS en todo el territorio nacional.
La segunda mitad del foro giró hacia las experiencias prácticas. Gustavo Yánez, de Sedapal, compartió los detalles del plan de contingencia de la EPS limeña, demostrando que la gestión de riesgos no solo implica prevención, sino también reacción rápida y eficiente frente a emergencias. Por su parte, Yanet Montoya Vera, de Sedapar Arequipa, mostró los desafíos regionales, en donde las condiciones geográficas hacen aún más compleja la implementación de políticas de resiliencia.
El foro cerró con la intervención de Kathy Negrón Tunjar, jefa de Sunass-La Libertad, quien dejó en claro que la supervisión de la correcta implementación de los planes de gestión de riesgos será vital para garantizar que las políticas no queden solo en buenas intenciones. Negrón recordó que la ciudadanía también tiene derecho a exigir que las EPS actúen de manera responsable frente a los riesgos.