La violencia en la región La Libertad no da tregua, y el distrito de Chao, en la provincia de Virú, se convierte nuevamente en escenario de un brutal ataque que deja a una persona fallecida y a otra gravemente herida. Este trágico evento resalta la creciente ola de crímenes que asola la región, causando temor y desesperación entre sus habitantes.
El pasado jueves 4 de julio, alrededor de las 6 de la tarde, dos ciudadanos venezolanos se encontraban disfrutando de anticuchos en un puesto ambulante ubicado en la avenida Víctor Raúl. En ese momento, un sicario abrió fuego contra ellos, desatando el pánico en la zona. Luis Alberto Tequedor Díaz, de 29 años, recibió tres impactos de bala que le arrebataron la vida de manera instantánea. Su compatriota, José Nikman Porras Rondón, de 38 años, también resultó gravemente herido en el ataque.
Testigos del hecho relataron a la policía que los dos hombres fueron sorprendidos por el sicario mientras comían. Los vecinos y transeúntes quedaron consternados al presenciar la escena y de inmediato llamaron a las autoridades. Los agentes de la comisaría del sector llegaron al lugar rápidamente y trasladaron a Porras Rondón al Hospital Belén de Trujillo, donde su estado de salud sigue siendo crítico.
La policía ha iniciado una intensa investigación para identificar a los autores de este ataque. Según las primeras informaciones, los sicarios habrían huido en una motocicleta tras perpetrar el crimen. Las autoridades revisan las cámaras de seguridad de la zona y recaban testimonios de testigos para dar con el paradero de los responsables.
Este nuevo asesinato se suma a la creciente lista de crímenes violentos en la región La Libertad. La situación en Virú es particularmente alarmante. Hace apenas unos días, el alcalde de la provincia, Javier Mendoza, junto con dirigentes de empresas de transporte y otras autoridades locales, solicitaron al Gobierno Central la declaración de emergencia por inseguridad ciudadana. Sin embargo, hasta el momento, esta solicitud no ha sido aprobada, lo que ha generado una sensación de abandono y vulnerabilidad entre los residentes.
El gobernador de La Libertad, César Acuña, ha manifestado su preocupación por la negativa del Gobierno Central a declarar la emergencia. Según Acuña, la violencia en la región ha alcanzado niveles insostenibles, y es necesario tomar medidas urgentes para proteger a la población.
La falta de respuesta del Gobierno Central ha dejado a los habitantes de Virú en una situación crítica. Los crímenes continúan aumentando, y la presencia policial, aunque efectiva en algunos casos, no ha logrado frenar la ola de violencia que afecta a la región. Los residentes viven con el miedo constante de ser víctimas del próximo ataque, y la sensación de inseguridad se extiende por todas partes.
En el caso de José Nikman Porras Rondón, la investigación ha revelado antecedentes de violencia física y psicológica, así como una denuncia por abandono de hogar. Sin embargo, estos detalles no atenúan la gravedad de la situación actual, donde dos vidas han sido brutalmente afectadas por la violencia.
