La tranquilidad del distrito de Pueblo Nuevo (Guadalupe), en la urbanización Los Jardines, se vio interrumpida por un violento homicidio a plena luz del día. Luis Alberto Paredes Rázuri (44), trabajador de la Empresa Constructora «CASA», fue acribillado por dos sujetos desconocidos cuando realizaba labores de control de tránsito en una obra de construcción.
El asesinato se produjo aproximadamente a las 12:00 del mediodía de ayer viernes, cuando Paredes Rázuri, quien trabajaba como «paletero» dirigiendo el tránsito vehicular de volquetes en la carretera de penetración al sector Los Jardines, fue atacado por dos hombres que llegaron en una motocicleta lineal. Los agresores, que vestían ropa de trabajo similar a la de la empresa constructora para pasar desapercibidos, abrieron fuego contra el grupo de trabajadores que se encontraba en el lugar.
De acuerdo con el testigo José Joel Díaz Dávalos (42), compañero de trabajo de la víctima, los dos sujetos desconocidos dispararon repetidamente, impactando a Paredes Rázuri con dos proyectiles: uno en la espalda y otro en la rodilla derecha. Tras el ataque, los agresores huyeron a toda velocidad en la motocicleta, dejando un rastro de siete casquillos percutidos y uno sin disparar en la escena del crimen.
El homicidio ha dejado consternados a los trabajadores de la empresa «CASA», que se encontraban en el lugar cuando ocurrieron los hechos. La precisión y frialdad con la que se llevó a cabo el ataque, así como el hecho de que los agresores utilizaran vestimenta similar a la de los trabajadores de la construcción, sugiere que el asesinato fue cuidadosamente planeado. Aún no se ha determinado el móvil del crimen, aunque las primeras hipótesis apuntan a un posible ajuste de cuentas o un conflicto relacionado con actividades delictivas en la zona.
La Policía Nacional del Perú (PNP) y el Ministerio Público ya han iniciado una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos. La escena del crimen fue rápidamente acordonada para que los peritos forenses pudieran recoger pruebas, entre ellas los casquillos de bala, que podrían ayudar a identificar el tipo de arma utilizada en el homicidio. Además, se está revisando el entorno de Paredes Rázuri para determinar si tenía algún tipo de amenaza o vínculo con actividades que pudieran haber motivado este ataque.
