El gobierno de Dina Boluarte afronta un panorama crítico con cifras récord de conflictos sociales y una desaprobación histórica. Según la Defensoría del Pueblo, en octubre de 2024 se registraron 209 conflictos sociales, un incremento en comparación al mes anterior. Simultáneamente, la encuesta de Datum para El Comercio revela que solo un 3 % de la población aprueba su gestión, consolidando el mayor rechazo a un presidente en años recientes.
El contexto de los conflictos sociales
De acuerdo con un informe de El Búho, los conflictos sociales han superado los 200 casos mensuales de manera sostenida desde el inicio del gobierno de Boluarte. La mayor parte corresponde a conflictos socioambientales, que representan el 51 % del total, destacando enfrentamientos vinculados a la minería y actividades de hidrocarburos. Loreto encabeza la lista con 32 casos, seguido por Cusco (23), Puno (18) y otras regiones que muestran una situación de constante tensión.
En octubre, movilizaciones como el paro de transportistas contra la inseguridad y las protestas por la Ley Antiforestal se extendieron a diversas regiones, evidenciando la dificultad del Ejecutivo para gestionar demandas sociales. Además, conflictos multirregionales y nacionales, como las manifestaciones por la crisis política que inició en diciembre de 2022, se mantienen vigentes.
Desaprobación sin fronteras
El rechazo hacia la gestión de Dina Boluarte es prácticamente uniforme en todos los sectores socioeconómicos y regiones del país. En los niveles socioeconómicos A/B, el rechazo alcanza el 94 %, cifra que sube al 95 % en el nivel C y al 96 % en el D. Incluso en el sector E, usualmente más afín a las políticas asistenciales, la desaprobación llega al 90 %.
Gustavo Adrianzén, presidente del Consejo de Ministros, intentó minimizar los resultados de la encuesta al señalar que se aplicó antes de la realización del Foro APEC 2024, en el que, según él, se lograron acuerdos beneficiosos para el país. Sin embargo, el evento no estuvo exento de controversia debido a la imposición de clases remotas y el uso de la fuerza para contener manifestaciones en Lima.
Un gobierno en crisis
El gobierno de Dina Boluarte no solo enfrenta el desafío de gestionar demandas sociales en un contexto de inestabilidad, sino también el de lidiar con la falta de respaldo ciudadano. Las cifras presentadas por El Búho y Datum reflejan un clima de insatisfacción generalizada, con pocas señales de mejora en el corto plazo. A medida que los conflictos sociales aumentan y la desaprobación escala, la capacidad del Ejecutivo para liderar el país sigue bajo cuestionamiento.
