En un esfuerzo por recuperar el orden y reforzar el principio de autoridad en el centro histórico de Trujillo, la Municipalidad Provincial de Trujillo realizó un operativo inopinado el último lunes, en el que más de 12 vehículos estacionados de manera indebida en los alrededores de la plaza de Armas fueron trasladados al depósito municipal.
El operativo, liderado por la Subgerencia de Fiscalización de Transporte y Tránsito, en coordinación con la Unidad de Tránsito de la Policía Nacional, identificó motocicletas y automóviles que ocupaban zonas rígidas, contraviniendo las normativas municipales.
Carlos Torres, subgerente de Fiscalización de Transporte y Tránsito, señaló que las calles que rodean la plaza mayor son consideradas zonas rígidas, donde el estacionamiento está estrictamente prohibido. “Ningún ciudadano o funcionario público puede utilizarlas como cochera para estacionar sus vehículos. Estas áreas están destinadas a la libre circulación y al respeto del espacio público”, enfatizó el funcionario.
Según Torres, la actual gestión municipal busca erradicar los malos hábitos que, durante décadas, han deteriorado el orden en el centro histórico. “No es aceptable que algunos vecinos y funcionarios utilicen las calles del centro como estacionamientos gratuitos. Esto no solo genera desorden, sino que también contribuye a los problemas de seguridad e inseguridad vial en la ciudad”, explicó.
El funcionario instó a los ciudadanos a optar por estacionamientos privados y a evitar ocupar áreas públicas prohibidas. Además, destacó que estacionarse en zonas rígidas no solo expone a los conductores a sanciones económicas, sino también al riesgo de robo de vehículos, en un contexto donde la inseguridad sigue siendo una preocupación.
El operativo fue realizado con el apoyo de agentes de la Unidad de Tránsito de la Policía Nacional, quienes aplicaron la infracción G-40 por estacionamiento en zonas rígidas, según el Reglamento Nacional de Tránsito. Los vehículos infractores fueron posteriormente trasladados al depósito municipal, donde sus propietarios deberán cumplir con los procedimientos y pagos correspondientes para recuperarlos.
Torres recordó que la mayor parte de los jirones del centro histórico de Trujillo son considerados zonas rígidas y, por ende, no están habilitados para el estacionamiento prolongado.
Bajo la dirección del alcalde Mario Reyna, la Municipalidad Provincial de Trujillo busca restaurar la autoridad que, según funcionarios, se perdió hace décadas. “Estamos trabajando para que los ciudadanos respeten las disposiciones municipales y contribuyan al orden en nuestra ciudad. Este es un esfuerzo continuo para garantizar que Trujillo sea un lugar más seguro y organizado”, manifestó Torres.
