El Juzgado Mixto Transitorio de Parcoy (Pataz), bajo la dirección del juez Carlos Darwin Garrido Rodríguez, dispuso la libertad con comparecencia restringida para el suboficial de tercera de la Policía Nacional del Perú (PNP), Francisco Yvan Malqui Robles, a quien el Ministerio Público le imputaba ser integrante de la organización criminal “La gran alianza”, liderada por Josue Manuel Blas Lezama, conocido como “Gato Cote”, dedicada a la minería ilegal.
Esta medida se dictó en el contexto del caso N° 00005-2024-1-1611-JR-PE-01, en el que Malqui Robles, junto a otros implicados, es investigado por su presunta participación en una organización criminal y otros delitos relacionados.
Francisco Yvan Malqui Robles, efectivo policial de 39 años que estaba en servicio activo en la Comisaría PNP Nicolás Alcázar, fue detenido bajo la acusación de formar parte de esta organización criminal. Esta detención formaba parte de una serie de operativos destinados a desmantelar redes delictivas que operan en la región, involucrando tanto a civiles como a miembros de las fuerzas del orden.
La investigación liderada por el Ministerio Público ha señalado a Malqui Robles y a otros implicados en la comisión de delitos graves, incluyendo crimen organizado, extorsión y otros delitos contra el Estado. Sin embargo, el reciente fallo judicial ha ordenado su inmediata libertad bajo la figura de comparecencia restringida. La medida de comparecencia con restricciones implica que Francisco Malqui Robles deberá cumplir con una serie de obligaciones para asegurar su presencia durante el proceso judicial. Entre las restricciones impuestas por el juez Garrido Rodríguez, se incluyen: presentación periódica: Deberá presentarse cada 30 días ante el despacho fiscal para el control de sus actividades, comparecencia obligatoria: deberá acudir cada vez que sea citado por las autoridades policiales, fiscales o judiciales, prohibición de ausentarse: no podrá ausentarse de la localidad donde reside sin previa autorización judicial, prohibición de comunicación: No podrá comunicarse con los demás investigados, siempre que no afecte su derecho a la defensa.
Además, el tribunal ha impuesto una caución económica de 5,000 soles para asegurar el cumplimiento de estas condiciones. El incumplimiento de cualquiera de estas restricciones o del pago de la caución conllevará la revocación de la comparecencia y la disposición de prisión preventiva.
LOS CARGOS
Entre los elementos de convicción presentados por la Fiscalía contra el agente se encuentran las interceptaciones telefónicas que revelan las supuestas coordinaciones ilícitas realizadas por Francisco Iván Malqui Robles. Las comunicaciones interceptadas detallan la colaboración de Malqui Robles con Juliza Milagros Trujillo Cruzado, quien también es investigada por su participación en la organización criminal, según las pesquisas. Estas interceptaciones muestran cómo el efectivo ayudaba a «Julissa» a evadir controles policiales y a coordinar la protección de vehículos que transportaban productos ilegales, según el Ministerio Público.
Así, el 19 y 20 de noviembre de 2022, Pancho y Juliza coordinaron la escolta de un vehículo en la jurisdicción de la Comisaría Rural de Sausal, asegurándose de que el vehículo no fuera detenido por otros efectivos policiales.
También, la Fiscalía, presentó monetarios mediante la aplicación Yape que, aunque fueron considerados por la defensa como montos insignificantes, fueron presentados como evidencia de los vínculos entre los investigados.
La defensa de Francisco Iván Malqui Robles argumentó que su cliente solo realizaba acciones de escolta o protección dentro de su jurisdicción policial y que no estaba involucrado en las operaciones delictivas de la organización en la provincia de Pataz, lugar donde opera «La Gran Alianza». Además, los montos de dinero transferidos mediante Yape fueron considerados demasiado bajos para ser relevantes en el contexto de las actividades de una organización criminal.
Según la Fiscalía, las comunicaciones interceptadas revelan la subordinación de Malqui Robles hacia Juliza Trujillo, quien le daba órdenes para asegurar que las rutas estuvieran libres de policías durante el transporte de mercancías ilegales. Esta colaboración ilustra cómo ciertos efectivos policiales pueden ser cooptados por organizaciones criminales para facilitar sus operaciones.
¿QUÉ DIJO EL JUEZ?
El juez estableció que, aunque existen comunicaciones entre Malqui Robles y Juliza Milagros Trujillo Cruzado, otra integrante de “La Gran Alianza”, estas comunicaciones están referidas principalmente a una supuesta venta de explosivos y a acciones de escolta o protección en la provincia de Gran Chimú, lugar donde Malqui Robles prestaba servicios.
El juez argumentó que: «Si bien es verdad existe comunicación del investigado con Juliza Milagros Trujillo Cruzado, quien también sería parte de la Organización Criminal la Gran Alianza, hecho incluso reconocido por el investigado; sin embargo, tales comunicaciones están referidas en rigor a una supuesta venta de un explosivo; y, por otro lado, a acciones de escolta o protección por parte del investigado a la persona antes referida en su tránsito por la provincia de Gran Chimú que es el lugar donde el investigado dada su función policial prestaba servicios; siendo que aun cuando pueda existir algún accionar delictivo, ello evidentemente no correspondería a acciones dentro de la organización criminal, en tanto el ámbito de operaciones de la misma no es en dicho lugar o zona territorial, sino en la provincia de Pataz, lugar distante a la sede donde presta servicios en su función policial el investigado, aunado a ello, los depósitos mediante el aplicativo Yape tampoco a criterio de este despacho lo vinculan a la mencionada organización dado el monto contenido en los mismos, por lo que siendo ello así, consideramos que no se cumple el primer presupuesto establecido en el artículo 268 del Código Procesal Penal.»
POLICÍA SE DEFIENDE
En su defensa, Malqui Robles sostuvo que no tiene vínculos con la organización criminal y que no conoce a los 13 investigados que se encuentran detenidos. Explicó que su relación con Juliza Milagros Trujillo Cruzado es de carácter amical, ya que ella es amiga de su esposa y fue presentada por su cuñada. Malqui Robles afirmó: «Quiero acotar mi persona no ha estado involucrado en ninguna banda criminal, yo no conozco a los 13 investigados que se encuentran detenidos, tampoco tengo conocimiento de a qué se dedican. Es cierto que conozco a la Sra. Yulisa Trujillo porque me la presentó mi cuñada y es amiga de mi esposa».
Malqui Robles argumentó que sus comunicaciones con Trujillo Cruzado eran en gran medida para ayudarla con problemas relacionados con su falta de licencia de conducir debido a infracciones por conducir en estado de ebriedad. Señaló que, en varias ocasiones, Trujillo Cruzado le solicitó ayuda para evitar que su vehículo fuera intervenido.
En cuanto a los depósitos mediante el aplicativo Yape, Malqui Robles explicó que Trujillo Cruzado le envió dinero para pagar una fianza de 900 soles, de los cuales ella solo tenía 750 soles. Añadió que, de haber sabido que Trujillo Cruzado estaba involucrada en actividades ilícitas, habría sido el primero en informar a las autoridades.
