Lo que empezó como una celebración institucional terminó con intervención y clausura. La Municipalidad Distrital de Moche clausuró este miércoles el conocido restaurante “El Mochica”, ubicado en su jurisdicción, mientras en su interior el alcalde de Trujillo, Mario Reyna Rodríguez, y decenas de trabajadores de la Municipalidad Provincial de Trujillo (MPT) conmemoraban el Día del Trabajo con una actividad oficial.
La comuna mochera intervino el establecimiento al constatar que no contaba con autorización municipal para operar, infringiendo así las normas locales sobre funcionamiento de locales comerciales. En medio del acto festivo, se procedió al cierre inmediato del recinto, generando tensión entre los asistentes y cuestionamientos en la opinión pública.
Según trascendidos, el evento habría sido organizado directamente por la Municipalidad de Trujillo como parte de sus actividades por el 1 de mayo. Lo que llamó aún más la atención fue que algunos trabajadores de la MPT habrían sido trasladados hasta el restaurante en unidades pertenecientes a la propia comuna provincial, lo que plantea interrogantes sobre el uso de recursos públicos con fines no esenciales.
Las imágenes y videos del operativo de clausura comenzaron a circular rápidamente en redes sociales. En ellas se observa a personal de Fiscalización de la Municipalidad de Moche colocando el afiche de “Clausurado” en la puerta del restaurante, mientras decenas de asistentes permanecían en el interior. Aunque no se han registrado incidentes mayores, la intervención ha causado revuelo político en el ámbito local.
Hasta el momento, la Municipalidad de Trujillo no ha emitido ningún pronunciamiento oficial sobre el hecho, ni ha explicado si el local fue alquilado por la comuna, si se hizo alguna verificación previa o si se incurrió en irregularidades administrativas al movilizar personal y recursos ediles para esta actividad.
La clausura, más allá del hecho en sí, reabre el debate sobre el control en el uso de bienes públicos, la fiscalización entre jurisdicciones y la planificación de actividades institucionales. En una ciudad que enfrenta serios problemas de seguridad, limpieza pública y gestión territorial, los ciudadanos se preguntan si es prioritario destinar personal y movilidad a celebraciones que podrían haberse realizado cumpliendo todas las normas.
El restaurante “El Mochica”, uno de los más reconocidos del distrito de Moche, deberá ahora regularizar su situación administrativa si desea volver a abrir sus puertas. Mientras tanto, el gesto de la autoridad mochera ha sido interpretado por algunos sectores como una acción de fiscalización legítima, y por otros como una evidencia del clima de fricción política entre alcaldes vecinos.
