Mineros ilegales dinamitan torre de alta tensión de Minera Poderosa

La madrugada del domingo 12 de enero de 2025, Minera Poderosa sufrió otro devastador ataque perpetrado por mineros ilegales asociados con organizaciones criminales.

Este nuevo atentado, el decimoquinto en los últimos cuatro años, consistió en la detonación de tres cargas de dinamita que destruyeron la torre de alta tensión N° 24 de la recientemente inaugurada Línea de Transmisión de 60 kV, infraestructura clave para el suministro energético de la planta Santa María y otras operaciones mineras en la región de Pataz.

La interrupción del suministro eléctrico paralizó temporalmente las operaciones, pero la empresa pudo restablecer el servicio gracias a un plan de contingencia. Sin embargo, el impacto acumulativo de estos ataques es alarmante, con 15 torres destruidas y 18 trabajadores asesinados por incursiones violentas desde 2021.

El ataque no fue un hecho aislado. Según fuentes de la Policía Nacional del Perú (PNP), los perpetradores aprovecharon la confusión generada por las explosiones para atacar una operación minera ilegal en la quebrada de Carhuabamba, secuestrando a 17 trabajadores de este enclave.

La situación se tornó aún más crítica cuando un enfrentamiento entre facciones rivales de mineros ilegales provocó un derrumbe en la entrada de una bocamina, atrapando a las personas retenidas.

Estas áreas, invadidas por mineros ilegales en los últimos años, se han convertido en zonas de alta peligrosidad. La empresa, en reiteradas ocasiones, ha denunciado la persistente presencia de ilegales y la falta de intervención por parte de las autoridades, lo que ha obligado a Minera Poderosa a retirarse de algunas zonas para garantizar la seguridad de su personal.

El reciente ataque ocurre en el contexto de la renovación del estado de emergencia en la región y la presencia de más de 200 efectivos policiales y militares. A pesar de estas medidas, el control territorial por parte de los ilegales sigue aumentando, agravado por el amparo del Registro Integral de Formalización Minera (REINFO), cuya vigencia fue extendida por el Congreso.

La empresa señala que el REINFO, lejos de fomentar la formalización, ha permitido el crecimiento exponencial de la minería ilegal, generando consecuencias devastadoras para la seguridad, el medio ambiente y la economía formal.

En respuesta al ataque, Minera Poderosa ha renovado su solicitud al Ejecutivo para cumplir con el compromiso de establecer un frente policial en Pataz, hecho prometido hace casi un año. La empresa enfatiza la necesidad de una acción coordinada y contundente por parte del Estado para erradicar la minería ilegal, antes de que esta siga extendiendo su influencia.

«Nos enfrentamos a una situación insostenible. La minería ilegal no solo afecta a nuestra empresa, sino también a las comunidades locales, el medio ambiente y la seguridad nacional. Urge que el Ejecutivo actúe con decisión para frenar este flagelo que amenaza con desbordar cualquier intento de control», señaló un representante de Minera Poderosa.

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