La madrugada de hoy, en un megaoperativo policial, las autoridades peruanas realizaron múltiples allanamientos y capturas en Trujillo, con el objetivo de desarticular la estructura de una de las organizaciones criminales más peligrosas de la región: «Los Pulpos Nueva Generación».
Entre los implicados, destaca el nombre de Elizabeth Almendra Llaure Fernández, conocida como «Madrina» o «Almendra”, quien resulta siendo una suboficial de la Policía Nacional en Trujillo, detenida durante la redada que fue ejecutada por agentes del Grupo Especial de Respuesta Contra el Crimen Organizado (GRECCO), en colaboración con unidades de la Dirección General de Inteligencia del Ministerio del Interior (Digimin), y la Fiscalía Especializada en Crimen Organizado de La Libertad.
De acuerdo a las investigaciones policiales y fiscales, su rol dentro de la organización ha sido fundamental para el funcionamiento de este grupo criminal que lidera Jhonsson Cruz Torres (a) Jhonsson.
Almendra, quien además se desempeñaba como agente de la PNP, utilizaba su posición para abastecer de información y recursos a la banda. Su papel como «Madrina» iba mucho más allá de la logística criminal, ya que se encargaba de coordinar ubicaciones y engañar a posibles víctimas, estableciendo una red de apoyo que facilitaba el accionar violento del grupo, señalan las pesquisas.
DOBLE ASESINATO
Según las investigaciones, Elizabeth Almendra Llaure Fernández fue pieza clave en un doble homicidio, donde abasteció de municiones el revólver y la pistola utilizados para ejecutar a Eder Luciano Castillo y Elvis Zavaleta Aranda. Este caso representa una muestra de cómo Almendra utilizaba sus contactos y acceso a armamento para facilitar homicidios selectivos, típicos de la modalidad de sicariato que caracteriza a «Los Pulpos Nueva Generación».
En otra operación delictiva, la «Madrina» fue vista junto a otros miembros de la organización buscando lugares estratégicos para extorsionar, ubicando a la víctima conocida como «Maflow», según las indagaciones.
La participación activa de Almendra en estas acciones confirma su rol de coordinadora en operativos de extorsión, mostrando cómo los miembros de la banda no solo se enfocaban en el sicariato, sino también en operaciones extorsivas que generaban ingresos ilícitos para el grupo.
También se intervino su vivienda de la calle Alfonso Ugarte 260, en el distrito de Florencia de Mora, donde se incautó una caja de municiones con 50 cartuchos calibre 380.