La víctima, identificada con las iniciales E.B.P.M., residente de la calle 09 de Octubre N°1304 en el distrito de Florencia de Mora, Trujillo, denunció un intento de extorsión ante la División de Investigación Criminal Norte (DEPINCRI NORTE). Según su testimonio, aproximadamente a las 9:00 a.m., desconocidos dejaron bajo la puerta de su domicilio un manuscrito en el que le exigían el pago de diez mil soles (S/. 10,000). El mensaje incluía el número telefónico 938313283 para coordinar el pago.
Este incidente se suma a una serie de hechos delictivos que han sembrado el terror en Trujillo y sus alrededores en los últimos días. El 13 de febrero, un bus de la empresa de transportes El Dorado fue interceptado en el sector La Rueda Macabí, distrito de Paiján, por dos sujetos armados que obligaron a los pasajeros a descender y posteriormente incendiaron el vehículo. Este ataque es el tercero que sufre la empresa en menos de una semana, presuntamente por negarse a pagar cupos extorsivos.
Además, la madrugada del 14 de febrero estuvo marcada por múltiples explosiones en diferentes puntos de Trujillo. Una de ellas ocurrió cerca de la base policial del Escuadrón de Emergencias Centro, en una vivienda ubicada en la avenida Húsares de Junín. Otro atentado se registró en la urbanización Palermo, donde las cámaras de seguridad permitieron la captura de dos individuos implicados en el hecho. Estos eventos han generado una creciente sensación de inseguridad entre los habitantes de la región.
En medio de esta ola de violencia, las declaraciones del gobernador regional de La Libertad, César Acuña Peralta, han generado controversia. En un evento público, Acuña afirmó: «En Trujillo de diciembre hasta ahora no hay ningún secuestro. No hay amenazas a empresarios. Ahora lo que hay es bastante extorsión y las bombas». Estas palabras han sido criticadas por minimizar la gravedad de la situación y la percepción de inseguridad que afecta a la población.