Tres individuos, dos peruanos llamados Keevil Dany Ruiz Sánchez y Monica Aracely Delgado Burgos, y una ciudadana venezolana de nombre Franci lliani Casadiego Esa, han sido enviados a prisión preventiva por 18 meses debido a su presunta participación en el delito contra la dignidad humana en su modalidad de explotación sexual.
El operativo llevado a cabo por la Fiscalía Especializada en Delitos de Trata de Personas logró el rescate de varias víctimas de explotación sexual, incluyendo a una menor de edad. Este operativo se realizó en el establecimiento conocido como discoteca bar «Omnia», ubicado en el anexo de Retamas, en la provincia de Pataz.
Este logro es significativo, ya que la explotación sexual, especialmente de menores de edad, es un crimen atroz que causa un gran sufrimiento humano. En Perú, la pena por la explotación sexual de niñas, niños y adolescentes puede llegar hasta 35 años de prisión.
Durante el operativo, se realizaron a cabo intervenciones en tres inmuebles. Uno de ellos era el lugar de explotación, donde las víctimas eran forzadas a trabajar en condiciones de explotación sexual. Otro inmueble era utilizado como lugar de retención, lo que sugiere que las víctimas estaban retenidas contra su voluntad. El tercer inmueble era el domicilio de los presuntos explotadores.
