La Policía Nacional del Perú (PNP) reveló la existencia de una fosa común en la provincia andina de Pataz, en La Libertad, donde se presume que se encuentran los cuerpos de víctimas de la minería ilegal.
El jefe de la Tercera Macro Región Policial, general PNP José Zavala Chumbiauca, informó que la fosa fue localizada en las profundidades de un socavón, a unos dos o tres kilómetros bajo tierra, en una zona de difícil acceso controlada por «parqueros» involucrados en la minería ilegal.
El general Zavala explicó que el descubrimiento fue realizado por un equipo de la Dirección Nacional de Operaciones Especiales (Dinoes), que llegó hasta una concesión minera previamente tomada por mineros ilegales. En ese lugar encontraron un forado, descrito como una especie de «tragaluz,» donde habrían sido arrojados cuerpos de mineros ilegales fallecidos durante enfrentamientos entre bandas criminales que disputan el control de los socavones.
«Por lo difícil del acceso, no hemos podido abrir completamente este lugar posiblemente usado como fosa común, pero el personal que llegó a la zona ha visualizado entre dos y tres cuerpos», detalló el jefe policial en declaraciones a RPP Noticias. También mencionó que es probable que existan otras fosas similares en distintos puntos de la sierra liberteña, especialmente en zonas dominadas por la minería ilegal, que ha sido fuente de conflicto y violencia en la región durante muchos años.
Según el general Zavala, los cuerpos que se encuentran en esta fosa podrían ser de personas que murieron en los últimos tres años durante estos enfrentamientos violentos. Aunque hasta el momento se han visualizado solo unos pocos cadáveres, se teme que la cantidad sea mucho mayor. La policía ha enviado personal especializado para continuar con las labores de rescate y verificar la magnitud del hallazgo.
El expresidente de la Comisión de Energía y Minas del Consejo Regional de La Libertad, Greco Quiroz, reveló que durante su gestión en 2019 se documentaron al menos 280 personas desaparecidas desde 2015, quienes habrían muerto en enfrentamientos por el control de los socavones ilegales o en accidentes ocurridos durante las excavaciones clandestinas.
Quiroz agregó que, a menudo, las víctimas de la minería ilegal son personas que provienen de otras regiones o que migran a Pataz con la esperanza de obtener ganancias rápidas. Sin embargo, en lugar de prosperar, muchos de ellos terminan atrapados en una espiral de violencia, explotación y, en muchos casos, la muerte.
Impacto de la minería ilegal en Pataz
Pataz, una provincia rica en minerales, se ha convertido en un campo de batalla para bandas criminales que buscan controlar la extracción ilegal de oro. Estas bandas, conocidas como «parqueros,» suelen operar fuera de cualquier marco legal y utilizan la violencia para eliminar a sus competidores y mantener su dominio sobre los socavones. La falta de regulación y control efectivo por parte de las autoridades ha permitido que este problema crezca sin control, dejando una estela de muertos y desaparecidos.