El suboficial de la Policía Nacional del Perú (PNP), Víctor Bueno Alva, condenado a 12 años de prisión por el asesinato de dos personas durante el paro agrario en Virú, ocurrido en diciembre de 2020, continúa en libertad y en servicio activo, a la espera de que se resuelva su apelación.
Bueno Alva fue sentenciado por la Corte Superior de Justicia de La Libertad tras ser hallado responsable de las muertes de Reynaldo Reyes Ulloa, un obrero de 27 años, y Kauner Rodríguez de la Cruz, un adolescente de 16 años. Ambos fallecieron durante una protesta desarrollada en la provincia de Virú el 30 de diciembre de 2020, en el marco del paro agrario. La sentencia se basó en una valoración de pruebas por indicios, ya que no se encontró evidencia directa que lo vinculara con la muerte del menor, mientras que, en el caso de Reyes Ulloa, si bien hubo una pericia balística, no se describió con exactitud el proyectil encontrado en su cuerpo.
A pesar de la condena, un juez de la Corte Superior de Justicia de La Libertad dispuso la suspensión de la ejecución de la sentencia hasta que la apelación sea resuelta o se declare consentida. Esta medida ha permitido que el suboficial permanezca en libertad y siga en actividad en la PNP, lo que ha suscitado críticas de distintos sectores.
El juicio contra Bueno Alva atrajo la atención mediática luego de que el fotógrafo Iván Orbegoso capturara imágenes del suboficial disparando durante la protesta. A pesar de ello, la defensa del suboficial argumenta que la sentencia carece de pruebas directas que lo vinculen con la muerte de las víctimas, y hoy, la defensoría de la Policía ha llegado a Trujillo para brindar apoyo legal a Bueno Alva, impugnando la sentencia.
