La gerente regional de Transportes del Gobierno Regional de La Libertad, Mirella Urrelo, hizo una alarmante denuncia sobre la creciente amenaza de extorsionadores extranjeros que están sembrando el terror entre transportistas e inspectores de tránsito en paraderos y carreteras de la región.
Este problema adquiere dimensiones críticas, especialmente después de conocerse que el 90 % de los transportistas que operan en rutas hacia el Valle Chicama, Chepén o Virú están siendo víctimas de extorsión.
La situación ha alcanzado niveles peligrosos, con extorsionadores que se muestran cada vez más audaces, llegando incluso a intimidar a transportistas ya los propios inspectores de tránsito en plenos paraderos y en medio de las carreteras. La violencia se ha vuelto una herramienta común, con amenazas que incluyen el uso de armas de fuego contra quienes intentan detener o fiscalizar sus actividades.
Mirella Urrelo compartió ejemplos inquietantes de las tácticas utilizadas por estos extorsionadores. En paraderos, impiden que las empresas de transporte formal suban pasajeros, favoreciendo a los informales, y amenazan a los inspectores que realizan controles en el transporte informal.
En las carreteras, los vehículos informales buscan embestir a los inspectores, y en ausencia de la policía, recurren a la violencia extrema, incluyendo intimidación con armas de fuego, daños a los vehículos y, en ocasiones, el secuestro de los vehículos llevados al depósito.
Ante esta situación crítica, el gerente regional de Transportes ha instalado a la Policía Nacional para realizar operativos más contundentes para abordar esta problemática. Incluso sugirió el uso del grupo Terna para llevar a cabo operativos encubiertos, con el objetivo de obtener resultados más efectivos en la lucha contra la extorsión en el ámbito del transporte en la región.