La madrugada de hoy, Trujillo se convirtió nuevamente en escenario de un sangriento crimen que ha conmocionado a la ciudad. Carlos Antonio Espínoza Alayo, un abogado conocido en la región, fue brutalmente asesinado en lo que parece ser un ataque dirigido por sicarios.
El incidente ocurrió en el kilómetro 590 de la carretera Panamericana Norte, a la altura del óvalo del centro poblado El Milagro.
El ataque ocurrió dentro del vehículo que Espínola Alayo había alquilado, un automóvil blanco con lunas polarizadas y placa de rodaje T6S-282. Según los informes preliminares, los sicarios abrieron fuego contra el abogado mientras este se encontraba dentro del auto. Cerca de 10 disparos impactaron en su cuerpo, dejando a la víctima sin vida en el acto.
Los asesinos, después de cumplir su objetivo, huyeron del lugar, dejando el vehículo estacionado con el cuerpo del abogado aún en su interior. Fue el personal de la carretera de Moche quien, al realizar sus rondas habituales, descubrió la escena del crimen y de inmediato alertó a las autoridades.
Al lugar llegaron peritos de la Policía Nacional del Perú (PNP), quienes iniciaron las investigaciones y realizaron el levantamiento del cuerpo. Durante la inspección de la escena, los peritos hallaron cerca de 15 casquillos de bala, lo que confirma la intensidad del ataque.
Este asesinato no solo añade un nuevo caso a la preocupante lista de crímenes violentos en la región, sino que también destaca la aparente impunidad con la que operan las bandas criminales en Trujillo. La víctima, Carlos Espínola Alayo, era un abogado con una carrera consolidada, lo que plantea interrogantes sobre los motivos detrás del ataque.
