El actual alcalde de Cajamarca, excongresista y exsecretario general de Fuerza Popular, Joaquín Ramírez, investigado en un caso por lavado de activos, en el que además está implicada la lideresa fujimorista, Keiko Fujimori, está fuertemente vinculado a Trujillo, no solo en cuestiones de negocios y por los bienes (12 en total) que han sido incautados en nuestra ciudad de su propiedad y de sus familiares, sino que, además, quiso ingresar en el corazón de los trujillanos al tomar la batuta, en enero del año 2014, del club deportivo Carlos A. Mannucci.
En ese entonces, Ramírez era congresista de la República y mandamás del club UTC de Cajamarca, en el cual aún está presente. El investigado por lavado de activos se hizo de la presidencia del Club Carlos A. Mannucci, bajo el auspicio del excongresista Daniel Salaverry Villa, quien, con bombos y platillos, lo presentó en conferencia de prensa en aquel año.
En la presentación, el exsecretario general de Fuerza Popular anunció que el grupo empresarial Ramírez, del cual forma parte, iba a hacer todas las inversiones necesarias para reflotar al Carlos A. Mannucci.
“Nos están dando esta gran oportunidad al grupo Ramírez para asumir esta gran responsabilidad de sacar adelante un club tan querido, tan emblemático, como es Carlos A. Mannucci. Para eso nosotros (grupo Ramírez) vamos a hacer la inversión que se requiera. Sabemos que hay una sombra negra por allí, pero eso no nos intimida y ustedes no van a dejar que esa sombra negra siga allí”, expresó Joaquín Ramírez en aquella conferencia de prensa.
Cuánto dinero inyectó Joaquín Ramírez o el Grupo Ramírez en el Carlos A. Mannucci, sólo los actuales directos lo sabe, que, a propósito, algunos de ellos son actualmente investigados por supuesto lavado de activos en otros procesos que también están en marcha en Trujillo y que en los próximos días pueden dar que mucho que hablar, tanto como de un gol de chalaca o de arco a arco.
